Preguntas frecuentes

Categoría. A la hora de elegir un campamento lo primero que debemos pensar es a qué tipo de campamento queremos que vaya. Hay infinidad de temáticas y dependeremos de los gustos o de los objetivos que nos planteemos. Normalmente se diferencian dependiendo de las actividades que hagan en él cómo por ejemplo multiaventura, granjas, náuticos, campus deportivos, idiomas, tecnológicos, musicales, etc.

Días. Aquí nos encontramos muchas opciones, las más comunes son las siguientes: 1 mes, 15 días, 10 días, 1 semana o campamentos urbanos, de día. Esto es algo que también influenciara al precio final del campamento.

Idiomas. Actividades con idiomas, inmersiones o campamentos en el extranjero. Pueden ir desde campamentos con ciertas actividades en el idioma que elijamos a inmersiones completas o incluso viajar al extranjero. 

Precio. Depende tanto de los días como de las actividades. Es importante comparar los precios de diferentes campamentos ya que depende de los días de estancia, así como de las de las actividades que se vayan a desarrollar. Campamentos en los que las actividades requieran pocos recursos, deberían de ser mas baratos que campamentos que tienen muchas actividades o con mucha inversión en material.

Actividades. Dependerá de la temática del campamento. Hay unas cuantas actividades que suelen ser típicas de todos los campamentos, gymkanas, juegos de pistas, senderismos, talleres, etc. El resto de las actividades suelen ser las que marquen la diferencia y suele depender de la temática del campamento y del precio final que paguemos por el mismo.

Tipo de instalaciones. Albergues, masías, hoteles, camping, etc. Una de las cosas que también debemos fijarnos es el tipo de instalaciones en las que se organiza el campamento. Normalmente, las mejores instalaciones para la realización de campamentos son los albergues, masias, o incluso colegios que se han “transformado” con literas y todo. En definitiva, instalaciones cerradas en las que exclusivamente se van a realizar campamentos en esas fechas.

Pernocta. Debemos diferenciar los campamentos que son con pernocta de los que solo son actividades diurnas, aun que incluyan en su programa algún día de convivencia nocturna. En una convivencia en la que se hagan actividades, se acuesten y se despierten con sus amigos, es donde realmente van a vivir el sentimiento de un campamento.

Urbanos. Suelen ser los campamentos que organizan los colegios. Campamentos que normalmente se organizan en zona urbana y solo tienen las actividades durante el día.

Proximidad. A la hora de elegir un campamento, una de las cosas que normalmente tienen en cuenta los familiares es la proximidad en la que ellos van a estar. Esto tiene una gran importancia en campamentos de día o urbanos como normalmente se llaman. No consideramos que sea algo imprescindible, ya que estén donde estén vuestros hijos, estarán bien atendidos y la entidad organizadora del campamento en caso de necesidad, actuará y responderá como es debido.

Supervisión de los acampados. Es uno de los puntos que consideramos imprescindibles. En un campamento, los menores deberán estar bajo la supervisión del equipo de profesionales de este.

Los campamentos se suelen organizar desde los 5-6 años hasta los 17 años. Cada campamento debería de estar pensado para rango de edad, así como la elección del personal que va a trabajar con ellos. El perfil de los monitores que trabajar con unas edades u otras son diferentes y esta es la figura clave para que un niño disfrute de su campa. En cualquiera de las edades, los monitores les ayudaran en todo lo que necesiten, especialmente en las edades mas tempranas, en la organización de la maleta, en el aseo, etc.

Los primeros días de un campamento son un mundo y si hablan con vosotros puede ser que sientan esa morriña que tanto miedo os da. No tienen por qué estar pasándoselo mal. En este caso deberíais de hablar con el monitor o coordinador y que os cuente realmente como se lo esta pasando. ¡Confiar en ellos!

En resumen, la edad ideal para nosotros es la de 6 años. Cuanto antes pierdan ese miedo a salir de casa empezarán a disfrutar de su nueva vida de aventuras. A esta edad de 6 años, recomendamos una estancia de una semana.

Esta bien, pero no es imprescindible. Normalmente el 60% de los participantes de un campamento van solos. Los monitores, una vez más, son la figura clave, ellos son los que harán que nada mas llegar al campamento conozcan a sus amigos con los que van a realizar todas las actividades.

En el campamento, una de las experiencias más enriquecedoras y en las que todos los niños coinciden es en el conocer a nuevos amigos, cosa que quizás al ir con alguien conocido se pueda ver mermado.

Entendemos que es común que los padres inscriban a sus hijos en campamentos junto con amigos o hermanos, lo cual es una práctica normal y comprensible. Sin embargo, recomendamos que, aunque asistan al mismo campamento, no estén juntos en el mismo grupo o habitación, especialmente si son de edades diferentes.

Esta recomendación es importante porque, incluso dentro del mismo campamento, las actividades se adaptan según la edad de los participantes. Al separar a los niños en grupos acordes a su edad, nos aseguramos de que las actividades sean apropiadas y desafiantes para cada uno, promoviendo un desarrollo más efectivo y una experiencia más enriquecedora.

Además, una de las experiencias más valiosas de un campamento es la oportunidad de conocer nuevos amigos. Si bien ir con un conocido puede proporcionar una sensación inicial de comodidad, también puede limitar la interacción con otros niños y la formación de nuevas amistades. Alentamos a los niños a salir de su zona de confort, lo que fomenta su crecimiento personal y social.

En el campamento, los niños tienen la oportunidad única de desarrollar su independencia, aprender a colaborar con otros y construir relaciones significativas. Nuestro personal está capacitado para facilitar estas interacciones y asegurar que todos los niños se sientan incluidos y apoyados.

Anímelos a abrazar esta experiencia como una oportunidad para crecer, aprender y hacer nuevos amigos. Estar en diferentes grupos o habitaciones puede ser el primer paso hacia una aventura emocionante y llena de aprendizajes en el campamento.

En nuestra experiencia con campamentos, hemos visto que la mayoría de los niños están emocionados por la idea de asistir, aunque es natural que también sientan cierto miedo, vergüenza o incertidumbre. Como padres, es fundamental animarlos y hablarles de manera positiva sobre todas las actividades divertidas y las nuevas amistades que harán.

Es común encontrarse con situaciones donde los padres, con la mejor intención, dicen a sus hijos: «Si te lo estás pasando mal, iremos a buscarte». Sin embargo, esta promesa puede convertirse en un «as bajo la manga» que los niños podrían usar para regresar a casa, no porque realmente no estén disfrutando, sino como una salida fácil ante cualquier desafío menor.

En realidad, los niños en los campamentos suelen pasárselo muy bien. Por eso, recomendamos preparar a su hijo desde el primer día para la duración completa del campamento, enfocándose en la diversión y el aprendizaje que experimentarán. Ayudarles a mentalizarse para disfrutar plenamente de la experiencia y superar cualquier desafío inicial es clave para su crecimiento y disfrute.

Anímelos a abrazar esta oportunidad única, recordándoles que estarán en un entorno seguro, cuidado por profesionales, y que esta experiencia será una fuente de recuerdos felices y habilidades valiosas para toda la vida. ¡Confíe en la capacidad de su hijo para adaptarse, hacer nuevos amigos y disfrutar de todas las aventuras que el campamento tiene para ofrecer

En nuestra amplia experiencia organizando campamentos, hemos observado que la mayoría de los niños disfrutan enormemente de esta experiencia. Es común que, especialmente si es su primera vez en un campamento o si han cambiado de uno a otro, los niños puedan sentirse un poco emocionales al hablar con sus padres. Esto no significa que no estén disfrutando su estancia; más bien, es un reflejo de que están experimentando una gama de emociones intensas.

Como padres, este es un momento crucial para brindar apoyo positivo. Al hablar con sus hijos, es importante enfocarse en lo bien que se lo están pasando y en las experiencias positivas que están viviendo. Evitar expresar cuánto los extrañan o cualquier comentario que pueda intensificar sentimientos de tristeza es clave, ya que esto podría reforzar cualquier sentimiento negativo que puedan estar experimentando temporalmente.

Es importante recordar que estos momentos de nostalgia suelen ser breves y ocurren principalmente durante las llamadas. Fuera de estos momentos, los niños suelen estar disfrutando plenamente de todas las actividades y aventuras que el campamento ofrece. Por ello, recomendamos siempre hablar con el personal del campamento. Ellos están con los niños todo el tiempo y tienen una perspectiva real y objetiva de cómo se están sintiendo y adaptando. Confíen en su experiencia y conocimiento; ellos están allí para asegurarse de que sus hijos tengan una experiencia segura, enriquecedora y divertida. ¡Confíen en ellos y en la capacidad de sus hijos para adaptarse y disfrutar de nuevas experiencias!

Todos los campamentos deben de hacerse cargo de este tema. Se les debe pasar cuanta más información detallada mejor. Deberían de tener un protocolo de actuación tanto para la gente que trabaja en cocina como para todo el personal que este con los niños durante las comidas.

Las medicaciones que sean necesarias deberán de suministrarlas los profesionales del campamento, ya sean los coordinadores o el personal de enfermería contratado para el mismo.

Cuanto mas detallado y especificado se lo hagamos llegar mejor y siempre dárselo a los profesionales, nunca dejar que se lo auto suministren los niños.

Depende tanto de los días como de las actividades. Es importante comparar los precios de diferentes campamentos ya que depende de los días de estancia, así como de las de las actividades que se vayan a desarrollar. Campamentos en los que las actividades requieran pocos recursos, deberían de ser más baratos que campamentos que tienen muchas actividades o con mucha inversión en material.

A la hora de comparar los precios debemos fijarnos que sean durante los mismos días de estancia y más o menos en las mismas fechas.

¿Macuto o maleta? Es la típica pregunta antes de preparar el equipaje. Depende del tipo de campamento, pero a no se que sea un campamento itinerante o tipo scout, con rutas en las que tengan que portear su propio equipaje recomendamos maleta, ya que será mas sencilla de colocar y quedara todo a la vista.

En este caso hablaremos de campamento con pernocta, en los que se requerirá una maleta o macuto.

Esto es una de las cosas imprescindibles para ir a un campamento, debemos hacerlo con tiempo y con la ayuda de los niños, así se sentirán implicados y sabrán donde tendrán las cosas.

Cada campamento requerirá o no su material específico, por ejemplo, botas para un campus de futbol o de equitación. No obstante, normalmente hay un mínimo imprescindible, que cada campamento os lo hará saber para meterlo a la maleta. Os dejamos aquí una lista típica.

  • CAMISETAS DE MANGA CORTA, 1 POR DÍA.

  • PANTALONES CORTOS, MUDAS INTERIORES, 1 PARA CADA DÍA.
  • 2 PARES DE ZAPATILLAS.

  • CHANCLAS.

  • 1 SUDADERA.

  • GORRA.

  • 2 O 3 BAÑADORES.

  • 2 TOALLAS (1 PISCINA Y 1 DE DUCHA).

  • NECESER SENCILLO.

  • CREMA SOLAR.

  • SACO DE DORMIR.

  • LINTERNA.

  • CANTIMPLORA.

Albergues, masías, hoteles, camping, etc. Una de las cosas que también debemos fijarnos es el tipo de instalaciones en las que se organiza el campamento. Normalmente, las mejores instalaciones para la realización de campamentos son los albergues, masias, o incluso colegios que se han “transformado” con literas y todo. En definitiva, instalaciones cerradas en las que exclusivamente se van a realizar campamentos en esas fechas.